La personalidad es el destino
La personalidad es el destino.
La gente ha creído en el destino durante miles de años. Cuando nació, su vida ya estaba decidida.
La gente en estos días lo ve desde una perspectiva diferente. Crees que tienes mucho control sobre lo que te sucede. Creo que tu haces tu propio destino. Pero siempre viven de la misma manera. Incluso si intenta cambiar, se encontrará viviendo de la misma manera.
Cuando las personas se enfrentan a problemas, tienden a reaccionar de la misma manera y a tomar las mismas decisiones. Hay ciertos patrones en la vida, especialmente aquellos que son diferentes a los errores o fracasos. Este es un personaje.
Una persona con una etimología en la Antigua Grecia significa una herramienta para grabar o estampar algo.
La personalidad es algo profundamente arraigado o impreso en una persona que hace que se comporte de cierta manera.
Las personalidades genéticas o de la infancia están tan profundamente arraigadas que, a menos que se esfuerce mucho por reflexionar sobre sí mismo, no será consciente de la existencia de estas personalidades y del comportamiento que producen. Las experiencias y hábitos que se crean al darle vida a esto se suman para crear el personaje.
Las personas toman ciertas decisiones y están grabadas neurológicamente en nuestro cerebro. La gente no tiene más remedio que repetir el patrón. Porque el camino ya está despejado. Se convierte en un hábito y el personaje se compone de miles de esos hábitos.
Si desea cambiar su personalidad tan bien formada, debe comenzar con una buena comprensión de su personalidad. En particular, los patrones negativos que se repiten constantemente deben examinarse cuidadosamente.
No puedes deshacerte de las huellas que conforman tu personalidad, pero puedes convertir los puntos negativos o débiles en fortalezas.
Enfrentar sus propias limitaciones y fortalezas lo liberará del cautiverio de su personalidad.
Cuando se conoce a sí mismo correctamente, puede alejarse del patrón en el que siempre cae y suavizar la influencia de ese patrón.
A través de la práctica y el esfuerzo constantes, puede crear un nuevo hábito o patrón y crear activamente una personalidad y un destino que se adapte a él. Entonces comprenderá su verdadero potencial y querrá ser quien es y no se esforzará por ser otra persona.
En lugar de huir de sus debilidades y convertirlas en fortalezas, las verá como su verdadera fuente de fortaleza.
El carácter es el destino.
Enfrentémonos a nuestra personalidad, rompamos los patrones repetidos y creemos nuestro propio destino.
Emocionesdiarias
Comentarios
Publicar un comentario